Días sin horas actualizado.
Sería el crujido de los neumáticos, o quizá la noche, más que la noche la imposibilidad de que fuera cualquier otro momento del día excepto la noche. El abrupto deslizarse del automóvil por aquel camino sin asfaltar, atravesando el polvo en suspensión y moviéndonos a espaldas de las casas que tenían ventanas apagadas de gente durmiendo. Esa gente que se dormía a las once para trabajar al día siguiente, esa gente que encontraba su realización en la jornada de ocho horas y una familia que apagaba su vida al encender la tele. Nos sentíamos guardianes de sus sueños, Morpheos, viviendo lo que ellos sólo anhelaban inconscientemente porque habían dejado de anhelar al tiempo que aprendieron a callar. Colándonos por las rendijas de sus contraventanas para desnudar su lívido, para crispar su aceptación muda de la realidad. Nosotros que mirábamos esas ventanas mientras nos comíamos a besos y nos desnudábamos del todo, anhelando el siguiente beso y el siguiente gemido. Nosotros que eramos los rey...
Comentarios
son relatos cortos que te pasan por la cabeza? Sólo he leido este último de "No mueres", pero me ha conmovido, me ha dado ganas de leer los demás, pero... todos son tan melancólicos??
besitos y ya escribiré!
pd.- no estoy de erasmus, aunque me lo estoy planteando para el año que viene. besos otra vez!
ppd.- a ver si cuentas algo de Aarhus.
Seguiré con mis historietas en breve, tengo que preparar esta experiencia de una semana aqui.
Vete de erasmus!!! es lo mejor que te puede pasar.un beso
Fdo. Berenice